Las visualizaciones son espacios donde imaginas algo que quieras que  suceda. Esta práctica ancestral se ha usado durante años y actualmente es una herramienta poderosa para reducir el estrés de forma significativa. Emil Coué (psicologo frances)  popularizó la utilización del pensamiento para tratar síntomas físicos, ya que él había observado que sus pacientes empeoraban muchas veces al pensar en pensamientos negativos de forma obsesiva. Afirmaba que “uno es lo que piensa que es” y aconsejaba a sus pacientes que se dijeran a sí mismos afirmaciones positivas y practicaran la relajación muscular, evocando deseos positivos.
Hoy en día, se usan técnicas de visualización e imaginación para el tratamiento de diversas enfermedades físicas que cursan con dolor y otras relacionadas con el estrés. El grado de eficacia depende de la actitud de cada persona  – el deseo de sentirse mejor no es suficiente, uno debe creer que lo logrará- y de la práctica repetida y constante.